La combinación de disrupciones por la pandemia, recuperación de la demanda
norteamericana, restricción de la oferta de transporte y congestión en los principales
puertos provocan una ?temporada pico permanente? que afecta a los fletes marítimos de
todo el mundo.
La escalada sin precedentes de los fletes marítimos continúa rompiendo todos los
pronósticos y en el ambiente ya se habla de una ?temporada pico permanente?. En el inicio de
la pandemia, ante la previsión de un derrumbe del comercio mundial, las compañías
marítimas tomaron decisiones para protegerse: quitaron buques de las rutas y suspendieron
puertos de escala para no afectar sus finanzas.
El dato es sensible: el 80% del volumen global y el 70% del valor global del comercio exterior se
hace por vía marítima. De ese total, el 52% son mercaderías que viajan en contenedores. Este
?ajuste de la oferta? fue coordinado, porque siete de cada diez contenedores que navegan en
el mundo lo hacen en buques de tres alianzas marítimas.
Esta concentración habilitó una decisión común que no solo permitió evitar pérdidas en el
peor año del comercio mundial desde la Segunda Guerra Mundial, sino que en 2020 las
navieras registraron un año récord de ganancias.
Pero ante los primeros síntomas de recuperación productiva de China primero, y de la
demanda norteamericana después, las navieras no dilataron la actualización de su oferta.
Por el contrario, mantuvieron restricciones en los servicios que elevaron ?artificialmente? los
fletes en todo el mundo.
Fuente: CIRA - CÁMARA DE IMPORTADORES DE LA REPÚBLICA ARGENTINA